“Volver a uno mismo sin perderse es la tarea de las migraciones. Mudas están las cosas al otro lado de las puertas en espera de las aves y de los silencios. Porque el miedo no conoce el silencio como un abandonado no comprende la libertad de estar solo. Tal vez la inquietud que arrastro en la habitación abrigue la impaciencia del que quiere hacerse compañía.”
LUIS GARCÍA MONTERO